Esta frase sugiere que es importante distinguir el motivo por el cual se está bebiendo alcohol. Dice que está bien beber cuando uno se siente feliz, pero no está bien recurrir a la bebida como una forma de escapar de la infelicidad o los problemas.
Beber para celebrar y disfrutar de momentos alegres está bien, pero beber para olvidar o evitar enfrentar emociones negativas no es una buena estrategia. La frase nos recuerda que el alcohol no soluciona nuestros problemas o tristezas, sino que puede empeorarlos a largo plazo.
La idea es que bebas para celebrar y compartir momentos alegres, pero no uses el alcohol como una forma de escape o como una solución a tus problemas.
"El amor es la última filosofía de la tierra y del cielo."
Francisco de Quevedo 1580-1645. Francisco de Quevedo y Villengas. Escritor español.