Esta frase significa que cuando algo bueno en nuestra vida se acaba, siempre hay nuevas oportunidades y cosas buenas que vendrán. Pero a veces nos quedamos tan enfocados en lo que hemos perdido o en los fracasos que no nos damos cuenta de las nuevas posibilidades que se presentan frente a nosotros. Es como si estuviéramos tan concentrados en mirar una puerta cerrada que no vemos que hay otra puerta que se ha abierto y nos está esperando.
La idea es estar atentos y abiertos a las oportunidades que la vida nos ofrece, en vez de quedarnos lamentando lo que ya no está. ¡Siempre hay nuevas puertas de felicidad esperándonos!
"El amor es fe y no ciencia."
Francisco de Quevedo 1580-1645. Francisco de Quevedo y Villengas. Escritor español.