Esta frase nos está diciendo que cuando logramos resolver un conflicto a través de la violencia o la fuerza, la paz que se alcanza no es realmente duradera o auténtica, sino simplemente una pausa temporal en la lucha.
Imagina que tienes una pelea con alguien y decides sacar una navaja para intimidarlo. Si esa persona se rinde por miedo, puede que haya un momento de calma y paz en ese instante, ya que has logrado imponer tu voluntad. Sin embargo, esa tranquilidad no durará mucho tiempo, porque la otra persona podría buscar venganza o volver a desafiar tu autoridad en el futuro.
Es importante entender que la paz verdadera se alcanza a través del diálogo, la empatía y la comprensión mutua. Si realmente queremos resolver los conflictos, debemos buscar soluciones pacíficas y duraderas en lugar de recurrir a la violencia o la imposición.
"Entre todas las formas de cautela, la cautela en el amor es, posiblemente, la más letal para la auténtica felicidad."
Bertrand Russell 1872-1970. Bertrand Arthur William Russell. Filósofo, matemático y escritor británico. Premio Nobel en Literatura en 1950.