Esta frase nos está diciendo que la soberbia no es una muestra de grandeza real, sino más bien de un ego inflado. Si alguien se siente muy "grande" y poderoso, en realidad sólo está lleno de orgullo excesivo y no es una persona sana emocionalmente.
Imagina que una persona soberbia es como un globo inflado. Puede parecer grande y llamativo, pero si lo piensas bien, el globo está lleno de aire, no de algo sustancial. Lo mismo ocurre con alguien soberbio, su supuesta grandeza es un exceso de orgullo y arrogancia que no está basado en nada real o valioso.
Además, esta frase nos dice que algo hinchado no está sano. Podemos relacionar esto con una persona soberbia, ya que su actitud no es saludable ni beneficiosa ni para ellos mismos ni para los demás. La soberbia puede alejar a las personas y causar conflictos en las relaciones.
En resumen, esta frase nos invita a reflexionar sobre la diferencia entre la verdadera grandeza y la arrogancia inflada. Nos enseña que la verdadera grandeza está en ser humilde y reconocer nuestras virtudes y defectos de manera equilibrada, en lugar de intentar aparentar ser mejores o más importantes de lo que realmente somos.
"Da un poco de amor a un niño y ganarás un corazón."
John Ruskin 1819-1900. Crítico y escritor británico.