Esta frase significa que los amigos son muy importantes en momentos difíciles. Es como si fueran parte de nuestra esencia, como la sangre que corre por nuestras venas. Cuando estamos heridos emocionalmente, los amigos siempre están ahí para apoyarnos, sin necesidad de que los llamemos. Es como si supieran instintivamente que necesitamos ayuda y vienen a nuestro lado para consolarnos y brindarnos su apoyo incondicional. Es maravilloso tener amigos así, que siempre están dispuestos a estar ahí cuando más los necesitamos.
"El amor es fe y no ciencia."
Francisco de Quevedo 1580-1645. Francisco de Quevedo y Villengas. Escritor español.