Esta frase dice que en muchas ocasiones las personas que son consideradas como genios, ya sea en el arte, la ciencia o cualquier otro campo, también suelen tener una cierta dosis de locura o excentricidad en su personalidad.
La idea es que para tener un pensamiento realmente innovador y creativo, a veces es necesario salirse de los límites de lo convencional y adentrarse en territorios más emocionales o fuera de lo común. Es en esos momentos donde la locura o la audacia pueden jugar un papel importante.
Se dice que ciertos aspectos de la personalidad que pueden parecer extravagantes o excéntricos, en realidad pueden ser una muestra del genio o la creatividad que hay en una persona.
"Da un poco de amor a un niño y ganarás un corazón."
John Ruskin 1819-1900. Crítico y escritor británico.