Has leído bien...AMOR CONDICIONAL, quizá estemos acostumbrados a hablar de AMOR INCONDICIONAL cuando en realidad, la mayoría del tiempo vivimos el AMOR CONDICIONAL.
El amor condicional es el opuesto al amor incondicional, sin embargo día tras día nos vestimos de amor condicional y le ponemos su buena capa de maquillaje para disfrazarlo de incondicional.
El amor condicional espera porque no tiene, pide porque no da, busca las medias naranjas porque no ve que es una naranja entera y completa, quiere encontrar porque no halla, reparte pero no comparte...el amor condicional vive desde el temor y eso se convierte en miedo:
Miedo a perder porque no me creo suficiente, miedo a compartir porque mi amor es escaso, miedo a que no seas como quiero porque yo no me quiero.
El amor condicional siempre juega sus cartas a:
"Te amo si......." que se traduce a "Me amo si.....", por tanto eres responsable de cómo te amas y por ende de cómo te aman.
"Ninguna relación te dará la paz que tú mismo no crees en tu interior y no te brindará la felicidad que tú mismo no construyas".
Entonces hablar de amor incondicional es hablar de amor, respeto y aceptación a uno mismo. Es que ese amor que sientes por ti, destelle y envuelva a los demás. Es creer que no necesito cambiar al otro sino cambiar yo...es ver al otro como una oportunidad para crecer, para ver mi sistema de creencias y poder tambalearlas.
"Nada encontraremos en el otro si primero no lo hallamos en nosotros".
Vivir el amor incondicional en pareja no es mirarse el uno al otro para ser alguien....sino mirar desde su plenitud en la misma dirección.
El amor incondicional no entiende el te amo si porque ama sin necesitar al otro, hace algo más interesante....dice ¡NO TE NECESITO PERO TE PREFIERO!